PABLO SALVADOR CODERCH
La interpretación que de la Constitución o de una ley
realiza un órgano o un poder del Estado no depende tanto de los significados
posibles de los enunciados que se interpretan, como de la capacidad de reacción
de otros órganos o poderes que compiten con el primero. En este libro, la
teoría política positiva y la teoría de juegos se suman polémicamente al
arsenal de la dogmática jurídica en un intento de arrojar nueva luz sobre
algunos de los casos más relevantes sobre las libertades de información y
expresión resueltos por el Tribunal Supremo y el Tribunal Constitucional
durante el cuatrienio 1998-2001. Las diferencias de opinión entre ambos
tribunales trazan las fronteras de sus respectivos ámbitos de poder y no sólo
-como a veces ingenuamente se pretende- los perfiles de una discusión
científico-jurídica sobre la corrección de tal o cual interpretación de un
texto constitucional o legal. El conflicto no tiene naturaleza semántica sino
que consiste básicamente en la pugna por el monopolio sobre la potestad de
decir los casos susceptibles de amparo constitucional.
Además, el libro pone a disposición de sus lectores una
guía jurisprudencial del derecho español de las libertades de información y
expresión en su relación con los derechos al honor, intimidad y propia imagen
(arts. 18.1 y 20 CE). Ulteriormente, se analizan y comparan los
distintos remedios a los que cabe acudir para la mayor protección de los
derechos fundamentales de que se trata.
El libro finaliza con una reflexión sobre los límites del
derecho -concebido como instrumento de regulación de las relaciones sociales-
cuando se intenta aplicar a hecho o sucesos que tuvieron lugar en el marco de
auténticos e intratables conflictos civiles.