SANCHEZ ROSILLO, ELOY
Dueño de un estilo que lo distingue como poeta cristalino y preciso, limpio de encubridoras retóricas en su elegante y natural decir, Eloy Sánchez Rosillo da unos pasos más con Sueño del origen en ese largo camino propio que lo ha ido llevando desde las conmovidas elegías de su juventud hasta los emocionantes cantos de la cumplida madurez en la que ahora se encuentra. Prosigue de este modo un proceso ejemplar de crecimiento y transformación, orgánico y sereno, sin cortes ni saltos ni bruscos virajes. Desembocamos en este nuevo e importante libro en una luminosa consideración de las cosas del mundo y en una incondicional gratitud hacia la vida. Y en esa aceptación y entrega los poemas de Sueño del origen alcanzan una sabiduría nueva. Toda poesía auténtica contiene una revelación: los poemas en los que se evoca un paisaje, un momento del día o una emoción fugaz, manifiestan también la plenitud íntima del ser, una comunicación con lo más valioso y primigenio, una trascendencia que remite al origen. Como se dice en uno de los versos del libro, el poeta percibe en este punto culminante de su evolución que «todo es ya centro».
Dueño de un estilo que lo distingue como poeta cristalino y preciso, limpio de encubridoras retóricas en su elegante y natural decir, Eloy Sánchez Rosillo da unos pasos más con Sueño del origen en ese largo camino propio que lo ha ido llevando desde las conmovidas elegías de su juventud hasta los emocionantes cantos de la cumplida madurez en la que ahora se encuentra. Prosigue de este modo un proceso ejemplar de crecimiento y transformación, orgánico y sereno, sin cortes ni saltos ni bruscos virajes. Desembocamos en este nuevo e importante libro en una luminosa consideración de las cosas del mundo y en una incondicional gratitud hacia la vida. Y en esa aceptación y entrega los poemas de Sueño del origen alcanzan una sabiduría nueva. Toda poesía auténtica contiene una revelación: los poemas en los que se evoca un paisaje, un momento del día o una emoción fugaz, manifiestan también la plenitud íntima del ser, una comunicación con lo más valioso y primigenio, una trascendencia que remite al origen. Como se dice en uno de los versos del libro, el poeta percibe en este punto culminante de su evolución que «todo es ya centro».
