SEGUI, JOSEP LLUIS
El manuscrito
de Josep Lluís Seguí, La amante fea,
escrito en castellano, quedó finalista del XV
Premio la sonrisa vertical en reñidísima competición con la novela
ganadora. De ahí la recomendación expresa del jurado de que se publicara al
mismo tiempo que ésta.
á
Recordemos al
lector habitual de esta colección que
Seguí había publicado ya con nosotros, en 1979, una hermosa novela, Diario de burdel (La sonrisa vertical
14), en su doble versión catalana y española, que también había quedado
finalista, hace quince años, en la primera convocatoria de este premio.
á
Josep Lluís Seguí nos
acerca aquí, mediante un lenguaje escueto, sin concesiones, como mediante
crudas pinceladas, a la experiencia de un hombre cualquiera, cuya existencia ?y
especialmente la sexual? se encuentra ya en cierto modo más allá de la vida, en
algún punto limítrofe con la muerte. Sus días transcurren en la terrible
cotidianidad de la nada, en la que tan sólo el sexo, ya sea en el esporádico
cumplimiento de su deber de esposo con Isabel,
en el añorante y sublimado recuerdo de Teresa,
la amante muerta, en los sórdidos y tal vez suicidas encuentros con Nelia, la amante fea, en la soledad de su propio placer ya inapetente, o aun
en la ausente presencia fortuita de alguna mujer de paso, tan sólo el sexo,
decíamos, consigue todavía mantenerlo colgado de la vida.
Pero todo el
mundo sabe que, desde que el gran Georges
Bataille ?a quien Seguí con esta
novela rinde un renovado homenaje? nos lo revelara con escalofriante lucidez,
el sexo, el orgasmo, es algo así como la «pequeña muerte»?, tal vez un aviso,
una constante y obsesiva premonición.