OLAIZOLA, JOSE L.
Juan XXIII sigue siendo considerado el Papa del Concilio por la gran
trascendencia que el Vaticano II ha tenido y tendrá en la Iglesia contemporánea
y en la del futuro. Además, participó como enfermero en la Primera Guerra
Mundial, fue delegado apostólico en Bulgaria, Grecia y Turquía -donde ayudó a
salvar a muchos judíos de las garras del nazismo-, así como nuncio en París,
patriarca de Venecia. A la hora de su muerte, desfilan por su mente las
personas a las que quiso y confía en que se le abrirán las puertas del Cielo,
no por lo que hizo, sino por lo que amó.
José Luis Olaizola ha investigado el Diario del alma de Juan XXIII, las cartas
a familiares e incluso su testamento espiritual, para recrear la peripecia
vital de este gran hombre que nació con vocación de cura de aldea y terminó
siendo Papa por obediencia.