LEROY, J.T.
Un chaval deambula por las calles de San Francisco
en busca de algún sustento que le permita
pagarse su adicción a la heroína y dar de comer
a su mascota. Para ello se pasea por la calle Polk,
famosa por albergar a jóvenes que se prostituyen.
A través de esta narración se transmite de
manera única cómo en algunas ocasiones la dulzura
de la infancia se transforma en mugre.