ROTH, PHILIP
Deudas y dolores es la primera novela larga de
Philip Roth. Ambientada en la década de 1950
en Chicago, Nueva York y Iowa City, presenta
un brillante r illante retrato de ficción de los Estados
Unidos de mediados del siglo XX, caracterizado
por limitaciones sociales y éticas y por unas
obligaciones morales muy distintas a las de hoy.
Recién licenciado del ejército que intervino
en la guer en la guerra de Cor ra de Corea, toda todavía bajo el impacto
de la reciente muerte de su madr te de su madre, liberado de
viejas ataduras y en ávida búsqueda de otras,
viejas ataduras y en ávida búsqueda de otras,
Gabe Wallach se siente atraído por Paul Herz,
estudiante graduado de literatura, y por Libby, la
temperamental y vehemente esposa de Paul. El
deseo que siente Gabe de vincularse al ordenado
«mundo de sensibilidad» que encuentra en los
libros se ve puesto a prueba por la anárquica lucha
de los Herz por adaptarse a una vida adulta
responsable y más tar le y más tarde, por sus pr por sus propias y ar opias y ardientes
aventuras sentimentales. enturas sentimentales. Impulsado por el
Impulsado por el
deseo de vivir seriamente y de actuar con generosidad,
Gabe tropieza con una prueba insuperable
en la persona de Martha Reganhart.
La compleja relación entre Gabe y Martha,
y el entusiasmo moral de Gabe por las tribulaciones
ajenas, constituyen el núcleo de esta
novela trágicamente cómica.
Ambientada en la década de 1950 en Chicago, Nueva York y Iowa City, Deudas y dolores presenta un brillante retrato ficcional de los Estados Unidos de mediados del siglo XX, caracterizado por limitaciones sociales y éticas y por unas obligaciones morales muy distintas a las de hoy. Recién licenciado del ejército que intervino en la guerra de Corea, toda todavía bajo el impacto de la reciente muerte de su madre, liberado de viejas ataduras y en ávida búsqueda de otras, Gabe Wallach se siente atraído por Paul Herz, estudiante graduado de literatura, y por Libby, la temperamental y vehemente esposa de Paul. El deseo que siente Gabe de vincularse al ordenado «mundo de sensibilidad» que encuentra en los libros se ve puesto a prueba por la anárquica lucha de los Herz por adaptarse a una vida adulta responsable y más tarde, impulsado por el deseo de vivir seriamente y de actuar con generosidad, Gabe tropieza con una prueba insuperable en la persona de Martha Reganhart. La compleja relación entre Gabe y Martha, y el entusiasmo moral de Gabe por las tribulaciones ajenas, constituyen el núcleo de esta novela trágicamente cómica. Reseñas:
«Un libro valioso, lleno de incidentes, irónico, triste e, incluso en su escena más desoladora, en cierto modo divertido.»
Elizabeth Hardwick, Harper's Magazine «Una primera novela de una madurez asombrosa.» James Atlas «Es un reportaje contemporáneo de mirada clara y mente tenaz, y tiene todas las virtudes de este joven escritor: franqueza, decisión y, sobre todo, una vitalidad inquebrantable que promete que sus lectores no lo dejarán ir. Llamará la atención.» Kirkus Reviews «Deudas y dolores es una prueba más del asombroso talento del Sr. Roth. Esta es una novela torpemente construida, pero morbosamente fascinante. Su tensión emocional es angustiosa, su perspicacia psicológica convincente. El Sr. Roth tiene un oído excepcional para el diálogo coloquial. Es un narrador eficaz, aunque prefiere contar muchas historias por separado antes que una única historia. Es tan seguro e incisivo con los personajes secundarios fugaces como lo es con sus protagonistas. Y no tiene absolutamente ningún gusto o sentido de la moderación en absoluto. Esto último, por supuesto, se considera una virtud literaria en algunos círculos.» Orville Prescott, The New York Times «[Roth] tiene el mejor ojo para fijarse en los detalles del estilo de vida americano desde Sinclair Lewis.» Stanley Edgar Hyman «Roth no ha estado nunca muy interesado en teorías y experimentos estéticos y cuando habla de escribir bien una historia lo hace, como cualquier artesano, con una comprensión práctica de los materiales que utiliza y las técnicas necesarias para realizar ese trabajo.» Al Alvarez, The Guardian