PEDRO CARRASCO JIMENEZ
La pregunta de qué es el terrorismo y cuál es su definición, es una de las cuestiones más recurrentes en las investigaciones y monografías sobre el terrorismo. La dificultad de definir el terrorismo no radica tanto en cuestiones técnicas, sino en las consecuencias políticas y jurídicas de cada definición con respecto a la violencia que ejerzan nuestros aliados, nuestros estados o las organizaciones a las que apoyemos. Los avances jurídicos con respecto a la definición del terrorismo, sobre todo a nivel internacional pero con importantes repercusiones nacionales, han estado y continúan estando lastrados por el irresponsable juego político de colgar la etiqueta de terrorista a nuestros enemigos evitando que nos la puedan colgar a nosotros mismos.
No obstante, sería también irresponsable por nuestra parte, en tanto que ciudadanos, pensar que la cuestión de la definición del terrorismo no es más que una diatriba política o un tecnicismo científico. Actualmente existe una amplia batería de medidas contraterroristas legales (plazos de detención gubernativa más amplios, medidas de investigación más invasivas, congelación de activos, ilegalización de partidos, largas penas de prisión, etc.) e ilegales (´guerras preventivas´, ´asesinatos selectivos´, ´detenidos fantasma´, técnicas ´severas´ de interrogatorio, ´combatientes ilegales´, entre otros eufemismos), cuya aplicación depende únicamente de dónde se fije la línea que diferencia entre el terrorismo y otras conductas.
¿Cuál es la diferencia entre la política y el terrorismo? ¿Cómo se distingue una asociación, una congregación religiosa o una ONG de una organización terrorista? ¿Qué diferencia hay entre un ataque de las fuerzas armadas estatales y el terrorismo? ¿Y entre una organización de tipo mafioso y una terrorista? ¿Es la piratería un acto de terrorismo? Estas y otras cuestiones son abordadas a lo largo de este libro en el que, utilizando los postulados de la Teoría de Sistemas, se reconstruye una definición del terrorismo más sencilla, precisa, completa, general y global que las existentes hasta el momento.
En la actualidad el proceso de alcanzar una definición del terrorismo sin ambigüedades ni lagunas, se encuentra bastante estancado, al acaparar casi todos los esfuerzos la articulación de medidas antiterroristas, pues, aunque con dificultades, es en lo único en materia de terrorismo en lo que se puede llegar a poner de acuerdo la comunidad internacional. Las investigaciones científicas y las políticas antiterroristas difícilmente nos aproximarán a una solución del terrorismo, que no se base solamente en neutralizar a los terroristas y/o en esperar a que se agoten, sin delimitar claramente qué pretendemos estudiar o solucionar. Esta obra, aunque ambiciosa, no aspira a convertirse en definitiva, ya que ningún conocimiento humano lo es, sino que más bien trata de avanzar en el necesario desarrollo teórico del concepto de terrorismo.