FONOLLOSA, JOSE Mª
«Ciudad del hombre: New York es un libro coral. En cierto modo su espíritu es whitmaniano; como Whitman, el poeta es aquí ´un cosmos´ y es ´hijo de Manhattan´. Los textos pueden leerse o bien como fragmentos de un diario íntimo-que contendría además, a retazos, una autobiografía fragmentaria, en parte real y en parte ficticia al parecer-o bien como breves monólogos autónomos de múltiples personajes distintos, cada uno con su propia vida, cada uno con su propia opción moral. Cierto que algunas de estas vidas o morales se emparentan, mas otras se contraponen violentamente; las más, al cabo, se complementan. Lo característico, lo distintivo de los textos es, en suma, esta huidiza ambigüedad. Quien habla es un solo hombre y muchos hombres a la vez; quien habla es el poeta y sus voces, esos a modo de heterónimos sin nombre ni rostro, definidos sólo por su ubicación en Nueva York: heterónimos epónimos.»
Pere Gimferrer