REYERO, FRANCISCO
Wiskilis, la sección que Paco Reyero ofrece en Herrera en la Onda al filo de las ocho menos veinte de la mañana, es, en palabras de Fernando Ónega, ´un fogonazo de 170 palabras (.), una luz que se enciende en el transistor y te hace un guiño de agudeza. Es un bisturí que hace la autopsia al último cadáver político. Es una profecia diaria, amasada con dos ingredientes: la gracia del Sur y el rigor del analistaö. Hallado como un juego de palabras de Wikileaks, el experimento consiste en concentrar el detalle, la primicia, la confidencia y la ironía en unas pocas frases. Y acabar enseñando al oyente, y ahora a tí, lector, rincones inexplorados y puntos de vista por descubrir. La afición a la lectura de los ministros, la estrecha relación entre Chacón y Rubalcaba, la pasión de Chaves por Liz Taylor, el yoga de Rato o el gusto por la copla de Dolores de Cospedal, salen a relucir en esta cuidada selección de artículos, donde hay dioses mayores, pero sobre todo paganos
