GARCIA MARQUEZ, GABRIEL
´Era, en efecto, el automóvil de Maruja.
Había transcurrido por lo menos media
Hora desde el secuestro, y solo quedaban
Los rastros: el cristal del lado del chofer
Destruido por un balazo, la mancha de
Sangre y el granizo de vidrio en el asiento,
Y la sombra húmeda en el asfalto, de donde
Acababan de llevarse al chofer todavía con
Vida. El resto estaba limpio y en orden.´
La crónica de un secuestro real magistralmente retratado por Gabriel García Márquez. «Era, en efecto, el automóvil de Maruja. Había transcurrido por lo menos media hora desde el secuestro, y sólo quedaban los rastros: el cristal del lado del chofer destruido por un balazo, la mancha de sangre y el granizo del vidrio en el asiento, y la sombra húmeda en el asfalto, de donde acababan de llevarse al chofer todavía con vida. El resto estaba limpio y en orden.» Juan Carlos Onetti dijo...
«Soy uno de los muchos miles de entusiastas que García Márquez tiene en el ancho mundo.»