LORENZO, SANTIAGO
Una herencia envenenada, un teatro madrileño, y tres hermanos metidos en un buen lío. Ellos, que odiaban el teatro, tendrán que montar una obra para salvarlo. A partir de ahí, líos, anormalidades, y unos personajes únicos. Todo por asumir unas deudas que no han contraído: pura España 2012... su crisis es también la nuestra.
La muerte de Ausias Susmozas, el manirroto patriarca del Pigalle, un teatro de pasado glorioso, reúne a sus tres hijos. Todos pretenden recoger algún consuelo monetario que compense el nulo cariño que les dispensó su progenitor. Pero este sólo les ha dejado una deuda inabordable: el banco se quedará el Pigalle si no logran saldarla. No tienen experiencia, pero deciden montar en tiempo récord, y con un equipo desastroso, una obra que podría salvar la vida de su teatro? e incluso la suya. Una tremenda y divertida sátira sobre el mundo teatral y sobre el mundo, en general, en quiebra.
«Al enfrentarse a la ingente tarea de la producción de su obra de teatro, los tres Susmozas imaginaban un álbum de cromos recién comprado. Que había que rellenar a base de comer pastelitos, atesorar estampas, negociar los cromos repetidos, perseverar con perspicacia hasta dar con los difíciles y pegarlos con cuidado para que quedaran derechos. Pero sin paga de domingo para comprar los pastelitos.»